Emfermedades mas Comunes de la Cavidad Bucal

Las enfermedades más comunes de la cavidad bucal son:

Caries Dental:
Es una enfermedad infecciosa que comienza en las estructuras duras del diente pudiendo avanzar hasta causar la perdida de las piezas dentarias, alterando las funciones bucales y comprometidas a la salud en general.

Con la terapia endodoncia, también conocida como tratamiento de conducto, se pueden salvar los dientes que sufrieron una lesión grave debida a las caries no tratadas a tiempo.

Enfermedad Periodontal:
Se inicia con la inflamación, el enrojecimiento y un sangrado de las encias.

Pueden padecerla incluso los niños siendo más peligrosa en adultos jóvenes y más frecuentes en adultos.

El tratamiento de estas enfermedades exige un cuidado minucioso de los dientes y de las estructuras que lo rodean, siendo indispensable implementar las medidas de higiene necesarias.



Maloclusiones :
Son alteraciones en la posición de los dientes que van generando problemas masticatorios y también articulares (articulación témporo mandibular).

Para el tratamiento de dicha enfermedad se requiere muchas veces de aparatología ortopédica en niños hasta los 12 años y en mayores de esta edad es necesario implementar aparatología ortodóncica.

Como prevenir las enfermedades bucales:
La reducción de la ingesta de azúcares y una alimentación bien equilibrada previenen la caries dental y la pérdida prematura de dientes.
Dejar de fumar y reducir el consumo de alcohol disminuyen el riesgo de cánceres de la cavidad bucal, enfermedades periodontales y pérdida de dientes.
El consumo de frutas y verduras protege contra el cáncer de la cavidad bucal.
Las caries dentales pueden prevenirse manteniendo de forma constante una baja concentración de fluoruro en la cavidad bucal.

Ello puede conseguirse agregando fluor al agua de bebida, la sal, la leche, los colutorios o la pasta dentífrica, o bien mediante la aplicación de fluoruros por profesionales.
La exposición a largo plazo a niveles óptimos de fluor reduce el número de caries tanto en los niños como en los adultos.
Usando esas estrategias de prevención se pueden evitar tratamientos dentales muy onerosos.